Con una alta convocatoria de público se realizó el primer Seminario de Ética y Negocios organizado por estudiantes de Ingeniería Comercial de la Escuela de Administración y Negocios (EAN). La actividad contó con la participación de los panelistas Michel Figueroa, de la Corporación Chile Transparente; y Claudio Ossa, del Departamento de Derechos Intelectuales del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, quienes compartieron interesantes visiones sobre el tema.

Figueroa abordó algunos aspectos de actualidad referentes a la corrupción y la relación con la ética, haciendo énfasis en los valores que debemos tener como sociedad y recalcando el rol de la formación de profesionales líderes con integridad, quienes “no solo tienen la tarea de promover las medidas de compliance – o cumplimiento normativo - dentro de las organizaciones, sino también de cuestionarse y reflexionar de cuál es la mejor forma de llevar a cabo estos procesos”, afirmó.

Por su parte, Ossa expuso sobre la propiedad intelectual y los derechos de autor, tratando el tema de ética y negocios apuntado hacia el entorno digital. Además, junto con resolver dudas sobre qué pasa con la información que publicamos en redes como Facebook o Youtube, indicó que las ventajas de la toma de decisiones éticas de parte de las organizaciones aumenta la probabilidad de éxito en un negocio, refuerza el compromiso de los trabajadores, fortalece la imagen de la empresa ante los inversionistas y contribuye a la satisfacción positiva de los clientes.

El Jefe de la Carrera de Ingeniería Comercial, Roberto Herrera, explicó que “la actividad se enmarca dentro de la planificación estratégica de la Escuela desde donde queremos aportar a distintos grupo de interés, más allá de nuestra principal misión que es formar profesionales de calidad. Ética y Negocios es una temática muy contingente”.

La idea de este seminario, que además fue postulada y adjudicada a un proyecto de extensión, surgió en la primera clase de la asignatura Ética y Negocios de la profesora Paulina Ceballos, ya que, tal como explicó la docente, “como introducción al curso se hizo una revisión histórica sobre la mirada que tiene la sociedad con respecto a las personas de negocio, las cuales son vistas como individuos que solo tienen un interés económico por la generación de utilidades”.

Como tras esta afirmación los estudiantes dijeron no estar de acuerdo, pues sentían que su profesión aporta mucho más que eso, surgió la idea de poder mostrar a la comunidad su preocupación por temas sociales y sensibles en la actualidad, como la ética.

“De alguna manera ellos quisieron diferenciar su formación, mostrando su preocupación por el tema, además de verlo como una puesta a prueba de la capacidad de gestión que han adquirido con los años en la carrera”, contó la académica.

Paola Zerega