En  el lapso de dos años, las instituciones públicas del Gran Concepción dispondrán  de un sistema de información del sistema de transporte que les permitirá, entre otras cosas,  compartir y analizar soluciones con respecto a rutas congestionadas o en puntos en que estadísticamente se producen más accidentes.
Esto, gracias al  proyecto Innova Bío Bío de Interés Público Plataforma Tecnológica para la Gestión Integral del Ssistema de Transporte en la Región del Bío Bío, que reúne a investigadores de las facultades de Ingeniería (FI) y de Arquitectura, Urbanismo y Geografía (FAUG).
La iniciativa tiene por objetivo desarrollar una plataforma tecnológica para mejorar la eficiencia del sistema de transporte urbano, utilizando indicadores de desempeño de operación de transporte y de seguridad vial en forma visual,  con el fin de incrementar el bienestar social de los habitantes de la intercomuna.
La directora del proyecto, la académica del Departamento de Ingeniería Civil (DIC), Mónica Woywood,  indica que la idea surgió en el contexto del trabajo del Grupo de Transportes, del programa 8.8 propuestas para la reconstrucción del Biobío, creado en la Universidad para analizar los problemas del sector tras el terremoto de febrero de 2010.
“En ese momento nos percatamos que, dada la falta de accesibilidad que tenía la comuna con respecto a algunos sectores –colapsó el flujo vehicular en puentes, hubo problemas de transporte publico, recuerda- había una necesidad de tener información de todo el sistema de  transporte, pero esa información estaba dispersa en distintos organismos y, en algunos casos, no existía porque había sido destruida por el terremoto”,  cuenta.
En este contexto, dice la académica, se hacía necesario generar una instancia para, por un lado, contar con datos homologables (de las distintas instituciones) y, por otro, determinar qué tipo de información no estaba siendo recogida por ninguna institución y era imprescindible en una situación de emergencia.
Y si en primer término, en el marco del trabajo del Grupo, las autoridades del sector pensaban dar solución a estos problemas –pensado en la ocurrencia de algún tipo de catástrofe a futuro- con la creación de una oficina de emergencia, el equipo optó por la plataforma de información -en lugar de una infraestructura física- que es lo que  dio origen a este proyecto.
En definitiva, lo que se hará es construir una gran base de datos integrada a un sistema de información geográfica (SIG) en una plataforma computacional.
“La idea -indica-  es que  junto al SIG también  se incorpore algún sistema que permita evaluar indicadores de operación de transporte para,  en primer lugar,  tener representaciones gráficas de distintos comportamientos del transporte público: vialidad,  accidentes, operación de tránsito, etc. y luego, generar indicadores de operación  propiamente tal, de forma de planificar el funcionamiento de la intercomuna desde el punto de vista del tránsito para el corto, mediano y largo plazo y tender a un desarrollo sustentable de la ciudades que están incorporadas en el Gran Concepción”.
En estos momentos, los investigadores se encuentran en la etapa de recolección de información en las distintas instituciones relacionadas con el tema, como la seremi de Transporte, la dirección de Vialidad, operadores de taxibuses, Carabineros y municipalidades, para dar forma a una suerte de “mapa global” de datos de la intercomuna que, como advierte la académica, hoy no existe.
Por eso, también habrá un trabajo importante en la estandarización de la información, ya que “cada organismo toma sus datos de forma independiente, con distintos sistemas de almacenamiento o está dada por distintos proyectos y, por tanto, son sólo como puntos del mapa”.
El  punto de unión de esta información son las encuestas de origen-destino que se han hecho en la zona. Y aunque la que sirve de base en estos momentos es antigua –data de 1999- los investigadores esperan que durante el desarrollo del proyecto se aplique  la  que fue aplazada a raíz del terremoto.
A partir de la información global contenida en el sistema, la plataforma será capaz de generar una serie de productos, abiertos a distintos tipos de usuarios.
“La idea es tener diferentes protocolos de entrada: las instituciones, según sus características, podrán acceder a determinado tipo de información; pero también cualquier usuario va  a poder ingresar a la plataforma y va a poder individualizar recorridos de transporte público, su frecuencia, o saber qué línea le sirve para llegar de un punto dado a otro o si tiene que hacer trasbordo, dónde hacerlo”,  señala.
Además de la información sobre accidentes –donde se espera integrar datos de ocurrencia, el tipo de evento más frecuente, datos que incluso pueden servir de base para proponer medidas para evitarlos- la plataforma también puede ser una herramienta para simular diversas situaciones de emergencia urbanas.
“Por ejemplo, en caso de manifestaciones, un incendio o accidente, poder indicar los desvíos del tránsito o si hay un repavimentación, evaluar su impacto en el resto de la ciudad”.  También está considerado que el sistema sirva de apoyo a la gestión de evacuaciones ante eventos de gran magnitud.
Mónica Woywood explica que junto con desarrollar la plataforma (que en un comienzo estará radicada en la UdeC), el proyecto considera realizar estudios de financiamiento de largo plazo, puesto que la idea  es llegar al establecimiento de un observatorio técnico de transporte con cobertura regional.
El proyecto, en marcha desde junio de este año,  tiene un presupuesto cercano a los 250 millones de pesos para tres años,  y cuenta con la participación de la Subsecretaría de Transportes y la Asociación Provincial de Dueños de Taxibuses de Concepción.
El equipo de investigadores está integrado, además, por los docentes del área de Transportes del DIC, Alejandro Tudela, Tomás Echaveguren, Juan Carrasco y Héctor Díaz; y de la FAUG  la urbanista Claudia Lima y la geógrafa Carolina Rojas.