El Sello Editorial de la Universidad de Concepción fue invitado a participar en la Feria Internacional del Libro de Lima, que se realizará desde el 19 de julio en la capital peruana.

El director de Publicaciones UdeC, Mario Rodríguez, destacó que –mínimo- el Sello universitario participa en dos ferias internacionales al año, además de la que realizan los editores independientes en Santiago.

En ellas atraen mucho los números de Revista Atenea, señala Rodríguez, y además los libros de artes como el de la Generación del Trece y el del Mural. “Creemos también que en esta Feria una gran atracción será la reedición de Lima la horrible, de Sebastián Salazar Bondy -incluida en la serie de Clásicos Latinoamericanos-, y que ya va en la tercera edición con las dos primeras completamente agotadas”, explica Rodríguez.

El director del Sello agrega que asistir a esta Feria permite circular los libros de la UdeC en un círculo, señalando además que los libros que no se vendan en esa muestra quedarán un tiempo en librerías limeñas.

Nueva línea

Por otra parte, recientemente el Sello Editorial UdeC ha abierto una nueva línea donde se publicarán las mejores tesis de postgrado de la Universidad. La serie se inauguró con la publicación de los libros Pascual Coña: Historias de sobrevivientes. La voz en la letra y la letra en la voz, de Susan Foote, y La trampa de los sueños. La narrativa de Mario Vargas Llosa, de María Luisa Martínez.

Esta línea, explica Rodríguez, se ubica actualmente dentro de Cuadernos Atenea, y aporta valor a las tesis de los alumnos de postgrado al contar con un referato externo, requisito importante para postular a fondos como Fondecyt.

“Recientemente Conicyt incorporó una nueva política sobre los libros, considerando aquellos que cuenten con referato externo al mismo nivel que las investigaciones publicadas en revistas ISI; es decir son considerados como publicaciones de corriente principal, por lo que publicar una tesis en esta línea les abre muchas posibilidades a los futuros investigadores”, sostiene.

Para ello el Sello Editorial tiene abierto el concurso todo el año, debiendo presentarse dos ejemplares, los que luego son dirigidos a los evaluadores externos para sus comentarios y decisión sobre la publicación.