El Desafío High Tech premió a los mejores proyectos de base tecnológica en una nueva versión de este concurso, el que este año tuvo que enfrentar mayores dificultades, debido a la contingencia nacional. Aun así, 95 proyectos de las regiones de Biobío y Ñuble que se presentaron, de los cuales 15 llegaron a la gran final.

Tras aproximadamente tres meses de concurso y preparación, los 15 equipos que fueron clasificados debieron presentar en tres minutos, de qué se trata su idea de negocios. En esta séptima versión, los ganadores fueron: CauchoShields, protecciones deportivas a base de neumáticos que ya cumplieron su vida útil; NaturaGummy, gomitas hechas con una base de antioxidantes provenientes de berries chilenos; I’m Safe, aplicación para visualizar zonas inseguras de la ciudad y conectarse con Carabineros; BloqBox, caja que registra la cantidad de bloqueador solar que utiliza cada trabajador por día y Lignyn, que transforma la lignina que se produce como desecho en la elaboración de celulosa para crear un filamento de impresión 3D.

El proyecto CauchoShields fue presentado por estudiantes de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas UdeC, mientras que NaturGummy es de propiedad de estudiantes del Colegio Alemán de Concepción. En tanto, I’m Safe pertenece a un equipo de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, BloqBox a estudiantes de la Universidad San Sebastián y Lignyn, a un equipo de la Facultad de Ingeniería UdeC.

El jurado encargado de seleccionar a los ganadores estuvo compuesto por Carlos Lewit, gerente general de Nisum Chile, Pablo Lama, representante de Banco Santander, Macarena Vera, directora regional de Corfo, Paulina Garín de la empresa CMPC y Hugo García de Inchalam.

Como novedad de esta séptima versión, el concurso se replicó en las tres provincias de Biobío y en la Región de Ñuble. Las categorías premiadas fueron Economía Circular, Escolares, Tecnología 4.0, Gran Industria y Forestal. La organización del estuvo a cargo de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Instituto Profesional Virginio Gómez e IncubaUdeC de la Universidad de Concepción.

El director de Innovación y Desarrollo de la Universidad de Concepción, Claudio Maggi, señaló que el concurso de este año tuvo más elementos de incertidumbre que las ediciones pasadas, debido a las movilizaciones, que dificultaron en algún momento la entrega de información a los escolares y estudiantes de educación superior a quienes está dirigido el evento. Sin embargo, la masiva convocatoria dejó satisfecho al equipo organizador. “Ya el poder hacer este tipo de convocatorias representa lo que es este nuevo Chile, abierto al talento, la diversidad cultural, los territorios y que se hace cargo de nuestra diversidad”, señaló.

La autoridad además destacó que este año, hubo varias empresas interesadas en participar, no solo como auspiciadores, sino que proponiendo desafíos que fueron tomados por los equipos como guía para proponer soluciones. “Estas buenas ideas representan talento emprendedor y posibilidad de movilizar a jóvenes. Por ejemplo, a gente de la provincia de Arauco, de Los Ángeles o de Ñuble, que tiene buenas ideas pero no ha tenido donde mostrarlas”.

Por su parte, la directora regional de Corfo, Macarena Vera, destacó la relación de varios años que tiene la Universidad con esta instancia estatal. “Con la incubadora de la Universidad de Concepción tenemos un trabajo colaborativo en forma permanente y apoyamos con nuestros diferentes instrumentos a fomentar el emprendimiento y la innovación. En este tipo de iniciativas, siempre estaremos presentes para levantar y desarrollar ecosistemas. Acá en la región tenemos que seguir potenciando eso para seguir encontrando emprendedores talentosos”.