La iniciativa cuenta con el patrocinio del Museo de Historia Natural de Concepción, Sernapesca, la Sociedad Chilena de Ciencias del Mar, La Sociedad Chilena de Ictiología, el Centro de Estudios en Biodiversidad y Hotel Sonesta.
A pesar de ser reconocido entre las 25 zonas de mayor biodiversidad marina del mundo, nuestro país exhibe niveles bajos de consumo de productos del mar en relación a otras potencias pesqueras. Las cifras señalan que el promedio anual de consumo de estos productos, per cápita, es de 7 kilos, en comparación, por ejemplo, con los más de 50 kilos por persona que se ingieren en Japón.
Con el fin  de incentivar la valoración de los alimentos provenientes del mar,  el año pasado, el Departamento de Oceanografía llevó a cabo un proyecto Explora destinado a promover, entre estudiantes de distintos establecimientos, el conocimiento en torno a la biodiversidad marina de la región a través de la gastronomía.

Como resultado de la iniciativa se generó un recetario marino, con 24  preparaciones originales creadas por los escolares, cada una complementada con la descripción de las especies utilizadas y su valor nutricional.

La directora del proyecto, Sandra Ferrada, cuenta que los jóvenes tuvieron la oportunidad de desarrollar experiencias en terreno que les permitieron conocer “cómo un organismo marino llega hasta su mesa, desde su comercialización directa en el terminal pesquero, su procesamiento en plantas de proceso, hasta su preparación y consumo en las actividades gastronómicas con el Chef  Jerónimo Rosas de Sonesta”.

Sobre la base de esa experiencia, este año se llevará a cabo un nuevo proyecto Explora –también dirigido por la investigadora-  con  un centenar de niñas y niños de Lirquén, Dichato, Chiguayante y Concepción, quienes conocerán más sobre los recursos marinos de la región a través de clases teóricas y prácticas en sus establecimientos, visitas a plantas de procesos, clases con el chef  Jerónimo Rosas, visitas al terminal pesquero y actividades gastronómicas en el Hotel Sonesta.

Bajo el título Cocina de mar: nuevos recursos, nuevos usos, el proyecto busca potenciar la utilización de especies subvaloradas en la zona, como las lapas (fissurellas), caracol trumulco (Chorus giganteus);  peces como el chancharro (Sebastes capensis), lisa (Mugil cephalus), pejegallo (Callorhinchus callorynchus), pejerrey de mar (Odontesthes regia),  y algas como la chasca (Gelidium lingulatum), luga roja (Gigartina skottsbergii) y la luga  cuchara (Mazzaella laminarioides).

“Dando énfasis en el consumo de estos organismos se espera diversificar el consumo de productos del mar, prefiriendo los frescos y/o congelados; a la vez de motivar productos alternativos ante la crisis pesquera que vive la región”, dice la investigadora.

Al igual que el proyecto anterior, se editará un recetario ilustrado, en formato digital,  que ésta vez incluirá  traducciones de algunas recetas al mapudungún, como una forma de acercar  a los jóvenes a las lenguas autóctonas.

También se considera realizar cápsulas radiales para la enseñanza de las ciencias del mar, un cortometraje y guías prácticas para los docentes, además de material complementario y de apoyo al recetario.

El proyecto será lanzado el 14 de junio, a las 16.40 horas, en el auditorio de la Facultad de Ciencias Naturales y Oceanografía, con la presencia de autoridades de gobierno y de la Universidad, representantes de Explora-Conicyt y de las instituciones patrocinantes; directores, apoderados y estudiantes de los colegios involucrados.