El subdirector del Centro INCAR e Investigador Principal de la línea “Genómica Acuícola”, Dr. Cristian Gallardo-Escárate, sostuvo que, gracias a la investigación realizada desde el año 2012 por el Centro INCAR de la Universidad de Concepción ya se han diseñado y desarrollado dos vacunas efectivas que podrán ser licenciadas y comercializadas prontamente para luchar contra distintas enfermedades de origen bacteriano y parasitario (como el piojo de mar) en el salmón, uno de los principales problemas de la industria nacional.

La información la dio a conocer durante su conferencia magistral “Catching the complexity of salmon-louse interactions: a functional genomics approach” (comprendiendo la complejidad de las interacciones salmón-piojo: una aproximación desde la genómica funcional), dictada en la III Conferencia Internacional de Inmunología de Peces y Moluscos, que se efectuó en Gran Canarias, España entre el 16 y el 20 de junio.

Gallardo-Escárate añadió que estas dos vacunas posicionan a Chile y al INCAR en la investigación a nivel internacional, “ya que, hasta ahora solo existen 24 vacunas disponibles con licencia comercial para su uso a escala mundial y muchas de ellas ya no son efectivas o se han quedado anticuadas porque la genética de los peces evoluciona, así como los patógenos”.

El académico agregó que “es evidente que la producción masiva de cualquier industria animal genera enfermedades y para combatirlo solo hay dos fórmulas, la inmunología y los antibióticos. Fomentar la prevención es algo especialmente importante para nosotros en Chile, donde el sector acuícola es nuestra segunda economía tras la minería”, subrayó, “y más con una acuicultura que está muy concentrada en la cría de salmón”.

El Investigador INCAR explicó que “aquí en Europa también tienen un gran problema en centros reproductores de Noruega y Escocia y en el Reino Unido con el piojo de mar, que además es un parásito que afecta no solo a los salmones de cultivo, sino también a los salmones salvajes, por lo que nuestras investigaciones darán un gran servicio global”.

Para ello, la propuesta realizada por Gallardo durante su participación pasa por conseguir fórmulas más efectivas y herramientas más potentes asociadas a la biología molecular, para poder reducir así el uso de antibióticos una vez se presentan las patologías, algo que demanda además urgentemente la Organización Mundial de la Salud por su efecto en las resistencias.