El estudiante de Ingeniería Comercial, Sebastián Torres, se convirtió ayer en el primer beneficiario de la solidaridad de un grupo de ex alumnos que vivieron en el Hogar Barros Arana durante su vida universitaria.
Los "ex hogareños", como ellos mismos se llaman, comenzaron a organizarse luego del terremoto para reunir recursos y contribuir a la reparación de los daños que tuvo la residencia estudiantil por efecto del sismo. De este primer contacto surgió la idea de crear una beca anual para apoyar económicamente a un residente del Hogar, de buen rendimiento académico.
De esto modo, y tras pasar el proceso de selección administrado por la dirección de Servicios Estudiantiles, Sebastián Torres recibió la Beca Ex Residentes en una ceremonia, que contó con la participación del director de Relaciones Internacionales de Institucionales, Iván Araya; el coordinador de Ex Alumnos, Mauricio Peña;  Gonzalo Carvajal, uno de los gestores de la iniciativa; el jefe administrativo de la DISE, Carlos Lermanda, y la jefa de la Unidad Hogares, Lorena Ayala.
“Esto que partió con un evento desafortunado, como fue el terremoto,  ha permitido que ellos se organicen y quieran devolver la mano a la Universidad, pero a través de otros alumnos”, señaló el director Iván Araya, quien afirmó que este tipo de acciones refleja el sello que la casa de estudios imprime en su ex alumnos.
“Esta es una universidad de vocación pública y en ese espíritu se inserta lo que están haciendo los ex alumnos al volver de esta forma a su alma mater. Esto resulta tremendamente motivante y, al mismo tiempo, representa un gran orgullo para quienes trabajamos en la Universidad”, dijo.
En tanto, el coordinador de Ex Alumnos, Mauricio Peña, destacó que los egresados “están absolutamente comprometidos con la Universidad” y señaló que la Beca Ex Residentes es una muestra de las varias iniciativas que los ex alumnos han emprendido con el fin de retribuir el apoyo recibido por la institución durante su formación. 
La Beca, explicó, consiste en un estipendio anual, que se entrega mensualmente y que permite que residente del Hogar, con buen rendimiento, puede enfrentar de mejor forma sus tareas académicas.
Carlos Lermanda,  jefe administrativo de la DISE -unidad que es la responsable de administrar el proceso de selección de los becarios-, también valoró la creación de este nuevo beneficio estudiantil. El directivo señaló que “en la entrega del beneficio se ha cumplido rigurosamente el proceso de selección y Sebastián ha respondido claramente con los requisitos”.
Ex alumno de Ingeniería Eléctrica, Gonzalo Carvajal se mostró satisfecho por el hecho de que algo que partió “como algo bien personal”, haya servido para motivar a otras personas a colaborar.  “Creo que más que un beneficio,  le estamos pasando (a Sebastián)  una responsabilidad que es mantener el concepto de hogar y él va a llevar el estandarte para tratar de mantener ese concepto”, dijo al felicitar al becario.
Sorprendido aún por la beca –sólo supo de ella el lunes-, Sebastián agradeció el apoyo que significa contar con el beneficio que –dijo- le permitirá contar con recursos para solventar sus gastos. “Para mí es un honor ser el primero y también una obligación demostrar porqué soy el beneficiario de esta beca”, manifestó, señalando que a futuro espera “ser parte de esto y poder ayudar a que alguien más pueda estudiar”.
En la reunión también estuvo presente el ex alumno de Kinesiología y académico del Departamento de Ergonomía,  Javier Freire, quien anunció el inicio de una campaña entre los ex becarios Enrique Molina, para crear una beca similar, también en el espíritu de devolver  el apoyo recibido de la Universidad.