El asalto de Talcahuano, hecho fechado el 7 de diciembre de 1817, fue el tema tratado en una nueva clase in situ vivida por los alumnos del curso de actualización Independencia en el Bío Bío: Guerra, política y sociedad, que imparte el Departamento de Ciencias Históricas y Sociales.
Los estudiantes conocieron detalles de ese episodio a partir de las exposiciones de los Doctores Armando Cartes y Juan Eduardo Mendoza, en un recorrido por distintos puntos de Talcahuano vinculados con el proceso independentista.
Usando como referencia el plano levantado por el ingeniero francés al servicio del Ejército de Los Andes, José D’albe, los asistentes recrearon la disposición de las fortificaciones que en 1817 –como contaron los académicos- sirvieron de resguardo para las tropas realistas, lo que permitió proteger el importante reducto de Talcahuano, esperando los refuerzos que el Virrey del Perú enviaría en su auxilio para recuperar Chile.
En su exposición, el abogado e historiador Armando Cartes afirmó que lo que desembocó en la Independencia fue la pugna entre Absolutistas y Liberales, explicando que el mayor anacronismo de la Independencia es plantearla como un problema nacional.
“Las naciones y los estados son el fruto de la Independencia y no el origen. El origen es un imperio que se desmorona, un poder que se constituye entre virreinatos, provincias y audiencias, que pudo haber terminado en una monarquía constitucional, donde todos respetemos al Rey de España: en absolutismo, donde vuelve todo atrás, o como terminó: en la insurgencia”, señaló.
El investigador agregó que en el período de la Patria Vieja nadie pensaba en la Independencia “salvo O´Higgins y cuatro amigos más”, mientras que la mayoría buscaba cierto grado de autonomía para autogobernarse como criollos, sin dejar de ser leales al Rey.
Sin embargo, luego del regreso de Fernando VII al poder el proceso se radicalizó, frente a la idea del monarca de volver a la situación previa. “Y esa dureza de él se transformó en una guerra de todo o nada y finalmente no fue nada, y fue un mundo nuevo que impuso La Independencia”, dijo.
Cartes también desmitificó ciertas celebraciones y fechas del proceso, afirmando que “las periodificaciones son consecuencia no inocente de una visión de la historia que intenta proteger ciertos lugares, ciertos personajes, sobre otros”.
Así, agregó que “el solo hecho de formar una independencia como tiempo eje es falso, porque hubo demasiadas continuidades coloniales y la Independencia no fue una revolución ni militar, ni social ni política; el solo hecho de redactar una independencia el año 1818 es falso, porque la guerra siguió largamente. El declarar como hitos principales Chacabuco, Rancagua, Maipú, es falso, porque aquí hubo muchos eventos más”.
Por eso, afirmó que “nosotros tenemos que hacer nuestra propia historia, nuestras propias periodificaciones, nuestros propios personajes”.
Por su parte, el profesor Juan Eduardo Mendoza, coordinador de esta formación, señaló que "el interés existente por este tipo de actividades  nos anima a realizar un nuevo curso durante el primer semestre”.
Los interesados pueden comunicarse al correo diplomahistoria@udec.cl o dirigirse al Departamento de Ciencias Históricas y Sociales, Edmundo Larenas 260 interior.