Con una reunión con las autoridades universitarias, se inició esta mañana la visita de los pares evaluadores designados por la agencia Qualitas para la última etapa del proceso de acreditación de la carrera de Pedagogía en Educación Musical, de la facultad de Educación.
Por la mañana, el comité de pares, presidido por Octavio Hasbún, académico de la Universidad Católica e integrado por los académicos Elke Zeiner y Mario Arenas, fue recibido por los vicerrectores Jacqueline Sepúlveda y Alejandro Santa María, además de los directores de Investigación y Creación Artística, José Becerra; de Docencia, José Sánchez; de Servicios Estudiantiles, Sara Mendoza, y de Estudios Estratégicos, Carlos Pérez.
Posteriormente, y hasta el miércoles, el comité se reunirá con autoridades, administrativos, académicos, alumnos y exalumnos de la carrera, así como empleadores de los profesionales egresados, para verificar el cumplimiento de los criterios necesarios para la acreditación de la carrera, así como el grado de compatibilidad existente.
Esta es la tercera vez que Pedagogía en Educación Musical se somete al proceso. En la primera ocasión fue acreditada por dos años y en el siguiente proceso por cuatro años, con un nuevo plan de estudios que este año verá a sus primeros egresados.
Así lo explicó la asesora de Proceso de Acreditación, de la Dirección de Estudios Estratégicos UdeC, Mónica Núñez, quien agregó que este proceso se inicia con la autoevaluación –a la que todas las carreras de la UdeC se someten- y continúa con la visita de los pares evaluadores que debe verificar que los que se dice en el documento se cumpla, en cuanto infraestructura, recursos, instalaciones, cuerpo académico… lo que necesita la carrera para funcionar.
“Se verifican, además, no sólo los estudios, sino también la formación integral. Aquí la carrera de Música tiene un plus debido a que los alumnos desde su ingreso se incorporan en grupos, bandas, asisten a eventos o tienen proyectos que les permite una vinculación más temprana con el medio”, dijo.
Para el académico de Educación, Jaime Hidalgo, es importante dejar en claro que los procesos de acreditación no son antojadizos, sino que se trata de exigencias para obtener recursos que van en directo beneficio de los estudiantes. “En el caso se estas carreras, esto se encuentra dentro de las políticas de evaluación de los profesores. Una vez que nuestros egresados ingresan al campo laboral, parámetros como la acreditación de la universidad y de la carrera que estudiaron les favorece a la hora de postular a trabajos”, dijo. Ello se aplica, además, a los convenios con otros países para la realización de becas o pasantías.