Bajo el título África canta a Violeta, un grupo de estudiantes de Angola, Mozambique y Sudáfrica preparó una muestra de cantos, poemas y cuecas de la cantautora en el cierre de las actividades del taller de Inmersión Lingüística y Cultura Chilena.

La iniciativa, que dirige la docente de Español María Elena Sahr, es parte del preparación que los becarios de la Agencia de Cooperación Internacional y Desarrollo (Agcid) reciben en la UdeC en el marco del Programa de Colaboración con Africa.

El Director de Relaciones Internacionales (Drii), Iván Araya, destacó el trabajo de los jóvenes en su vinculación con la cultura local y “particularmente en septiembre, un mes tan especial para nosotros”. Asimismo, subrayó el papel que cumple el intercambio cultural en los procesos de internacionalización y colaboración internacional, en el sentido de que “la vinculación entre personas parte por el conocimiento mutuo; si no conocemos las culturas, difícilmente podremos interactuar o construir cooperación”.

En tanto, Patricia Llanos, Coordinadora del Programa de Colaboración con África de la Drii, explicó que la presentación estuvo orientada a “acentuar la interculturalidad” entre los países, que -recordó- tuvo su primera parte con la celebración del Día de África en la UdeC.

Para los alumnos Tomás de Azevedo (de Mozambique) y Melesela Fokoane (Sudáfrica) este tipo de actividades, además de reforzar su inserción en la Universidad, contribuyen a acercarlos más a nuestro país, al que llegaron sin saber nada de idioma y cultura, como comentaron.

De Azevedo señaló que esto ha sido parte de su proceso de aprendizaje como estudiante y aseguró que “la cultura rompe fronteras”; mientras que Fokoane dijo que esta actividad le ha permitido conocer más de la música y la vida en el país, lo que lo hace sentirse como en casa.

Ambos reconocieron las fortalezas artísticas de Violeta Parra, su importancia para la cultura nacional, a la vez que comentaron que en este taller también han encontrado similitudes con manifestaciones culturales de sus países.

La presentación contó con el apoyo musical del conjunto folclórico de la Escuela Oscar Castro, cuyo parvulario -del que es parte un hijo de los becarios- fue el invitado especial del espectáculo.