ACTUALIZACIÓN
PERMANENTE DE LOS
CURRICULUM
DE
ESTUDIOS
DE
MEDICINA Elso Schiappacasse F.*,
Los comités de currículum de las carreras de Medicina han constituido uno de los pilares fundamentales en que se sustenta la formación de pregrado de los médicos. De ahí que los diferentes Decanos de las Facultades de Medicina designen a los miembros más destacados de su Facultad en estos comités. La confección de un currículum
adecuado depende de múltiples factores que deben ser reflexionados en
forma profunda. En el
pasado, estos factores eran estudiados con una periodicidad que daba
tiempo suficiente para desarrollar un análisis sistemático de cada uno
de ellos: número de alumnos que ingresan a la carrera; selección de
postulantes; requerimiento de docentes; presupuesto anual;
financiamiento de los diferentes programas; sistemas de
perfeccionamiento continuo del personal académico; fuentes de
financiamiento; infraestructura de la Facultad, especialmente de las
necesidades de las asignaturas básicas, preclínicas, clínicas,
internado; personal administrativo para la gestión de la Facultad, etc.
Producto de este análisis, se disponía de un organigrama desarrollado
por la experiencia adquirida en los años precedentes y las variaciones
de año a año no generaban grandes modificaciones.
Desde hace alrededor de 20 años
se ha producido una verdadera explosión de cambios en todas las esferas
de la vida humana, que continúa en forma acelerada en la era actual. Naturalmente, debido a la
expansión del conocimiento, sumado a la complejidad que lleva consigo
en el proceso de enseñanza aprendizaje, se ha hecho prioritario que el
currículum de Medicina deba sufrir un enfoque renovador casi continuo. La metodología asumida en años
precedentes, respondía al paradigma imperante y a un currículum
recargado, que no aceptaba nuevos conocimientos, aún cuando la
importancia de éstos justificara su inclusión. Este hecho ha cambiado
en forma progresiva en los últimos años: El proceso de globalización
ha contribuido a este nuevo enfoque en la formación de los médicos en
los diferentes continentes (1). Las nuevas tecnologías de
información y comunicación (TICs) han permitido que se disponga de
información actualizada y validada en las diferentes áreas de la
medicina, no sólo por disciplinas, sino que con relación al componente
académico adecuado para la formación de médicos. La medicina académica ha
contribuido en forma oportuna y eficaz a hacer posible este importante y
trascendental cambio de enfoque. Los organismos de Educación Médica se
han coordinado en los diferentes continentes para facilitar este
proceso, y lo han hecho con un entusiasmo y celeridad impresionante. Es así como, en la actualidad
se ha intensificado la cobertura e intensidad de la globalización y
esto ha producido cambios progresivos y significativos en los sistemas y
políticas de salud, como también en los diversos organismos que se
ocupan de la Educación Médica de pre y post grado (Federación Mundial
para la Educación Médica; Asociación Americana Europea de Escuelas de
Medicina; Federación Panamericana de Escuelas de Medicina). En 1999, se fundó en New York
el Internacional Institute for Medical Education (IIME), cuyo objetivo
fue crear una red global de Educación Médica que promueva las
competencias esenciales mínimas globales del médico. Desde su inicio,
la IIME ha organizado numerosos eventos y conferencias internacionales.
Uno de estos encuentros se realizó en el año 2003, en Copenhage (2)
"Medical Professionalism in Time of Globalization: New Challenge
for Medical Schools" en el cual se definió el perfil de egreso del
médico en base a competencias esenciales en las áreas de
conocimientos, habilidades y conductas profesionales y éticas. Como consecuencia de estos
esfuerzos mundiales, en la actualidad muchas Escuelas de Medicina han
introducido con éxito variaciones innovadores en sus currículum(3),
adoptando un currículum integrado, y eliminando disciplinas específicas
y cursos departamentales especiales. Sin embargo, los nuevos currículum aún requieren revisión, reflexión y flexibilidad: Day (4)
destaca la cobertura inadecuada de la medicina músculo esquelética en
los currículum, no obstante la elevada frecuencia de esta patología en
la población. Thurston (5) discute la importancia de la genética en
los planes de estudios, otro tópico que debería recibir mayor atención. Un camino para crear nuevos
espacios a los temas emergentes, sería eliminando redundancias de
frecuente observación en la mayoría de los currículum de medicina(3).
Por otro lado, debería adoptarse metodologías más adecuadas para
presentar algunos contenidos de manera integrada. Por ejemplo, la enseñanza
de Anatomía, tradicionalmente ha sido disciplinar, parcelar y con la
necesidad de disponer de laboratorios especiales de disección de cadáveres.
No obstante, existen varias Escuelas de Medicina que han reemplazando
este modelo por un sistema de presentación de piezas de anatomía
macroscópica, en el momento que se estudian la clínica de diferentes
órganos y sistemas. Whitcomb apoya esta práctica, planteando que la
disección de cadáveres no es un elemento esencial en la educación
profesional de los médicos, y que los alumnos que no han recibido este
tipo de experiencias educativas, de todos modos alcanzan un aprendizaje
significativo y profundo en anatomía, como sucede en la Universidad de
Western Reserve, Cleveland Clinic Lerner College of Medicine (3). En 1984 se publicó el documento “General Professional Education of the
Physicians and college preparation for medicine: GPEP"(1), que
concluyó que los cambios curriculares deberían hacerse en relación a
los cambios que se producen en los sistemas de atención de los
pacientes. Desde esa fecha se han implementado los cambios propuestos,
no sólo en la atención de pacientes, sino en el contenido de la
medicina misma. A pesar de estos avances, es
absolutamente necesario seguir modificando el currículum en forma
continua. El modelo actual de Educación Médica aún descansa en un
modelo reduccionista y positivista, que es deficiente para la formación
médica de un profesional del siglo XXI, porque no capacita
adecuadamente para hacer frente a las diversas y profundas necesidades
de los pacientes en sus aspectos físicos y especialmente en las
necesidades emocionales (2). Es necesario un nuevo
paradigma del proceso de enseñanza – aprendizaje en los estudios de
medicina, para lo cual se están ensayando algunas modificaciones
curriculares significativas para la nueva generación de médicos(6).
BIBLIOGRAFIA 1.
Learning objectives for
medical student education. Guidelines for medical school; report of the
medical school objectives proyect. Academic Medicine 1999;74:13-18 2.
David Stern; Andrzaj Woytssak; Roy Sahwarz.
Conferencia Internacional de la Federación Mundial de Educación Médica
(2003). Medical Teacher 25:6,2003 pp 589-595. 3.
Whitcomb Michael E. More on
the Education of Medical Students. Academic Medicine May 2007. vol 82
Issue 5: 433-434. 4.
Charles Dayand Cols.
Musculoskeletal Medicine. An Assesment of the attitudes and Knowledge of
medical students at Harvard Medical School. Academic Medicine May 2007.
vol 82 Issue 5:452-457. 5.
Thuston: Virginia Carol and
Cols.The Current Status of Medical Genetics Instruction in U.S. and
Canadian Medical Schools. Academic Medicine May 2007. vol 82 Issue
5: 441-445 6.
Cooper Ricard A., Tauber
Alfred I. Values and Ethics: A Collection of Curricular reforms for a
new generation of Physicians. Academic Medicine 2007, 82 (4); 321-323.
(*)
Médico Cirujano, Profesor Emérito, Dpto. Educación Médica,
Facultad de Medicina, Universidad de Concepción
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