Andamos en las nubes o
¿¡ No estoy ni ahí */&!!?¿?*
La típica frase de los jóvenes de los '90, se ha transformado en su bandera de lucha cuando se trata de hablar de política. Para muchos significa desconocimiento de las actividades oficiales, para otros es simplemente un método de expresar su descontento con el actual sistema.
Es lo que se ha llamado el virus del "Niahísmo", con síntomas como falta de protagonismo, deseos de ser un hombre masa o profunda antipatía frente a cualquiera que decida pedir la opinión sobre alguna cosa.
Quizá sea una moda. O tal vez el cansancio natural de quienes aún esperan ver cumplidas las eternas promesas, esas que afloran con cada candidatura política. En tiempos de elecciones se construyen castillos de buenos deseos sobre las nubes, sostenidos con los votos de los ingenuos que ya se tragaron el cuento la primera vez.
Pero el virus crea anticuerpos, para defenderse de las campañas que incentivan la inscripción en los registros electorales. Se hace más fuerte, y el estado de letargo niahista permanece sumido en el cuerpo de las víctimas. Ni las nuevas promesas, ni los políticos renovados con gusto light los podrán salvar. La vacuna debe surgir de ellos, quizá en el paso al tercer milenio.
Una inciativa destacable, es aquella que realizó un grupo de estudiantes de primer año de la carrera de Ciencias Políticas y Administrativas de la Universidad de Concepción, quienes decidieron ir al Congreso de la República en noviembre pasado, los días 11, 12 y 13, donde hicieron público el interés de los jóvenes en el quehacer nacional.
| Colores Políticos Varios | Instituto Nacional de la Juventud | Y los estudiantes |
María Graciela Badilla Quintana
mabadill@mail.udec.cl
Colaboradores:
ClaudiaReyes
LarryHenríquez