TRABAJO ORIGINAL
Experiencia docente en educación remota bajo contexto pandemia COVID-19
Francisco Franzani O.*a, David Miranda G.**a
RESUMEN
Introducción:
La crisis sanitaria mundial por COVID-19 obligó a las Universidades a dar un vuelco hacia una enseñanza de tipo remota que permitiera la continuidad de las actividades académicas, migrando de actividades presenciales a clases virtuales. Palabras clave:Educación a distancia, Aprendizaje a distancia, Educación online.
SUMMARY
Teaching experience in remote education under the COVID-19 pandemic
Introduction:The global health crisis due to COVID-19 forced Universities to turn towards a remote teaching methodology that would allow the continuity of academic activities, migrating from face-to-face activities to virtual classes.
Keywords: Distance education, Distance learning, Online education.
INTRODUCCIÓN La actual pandemia de la enfermedad COVID-19 se ha constituido en el desafío de salud pública más importante del presente siglo(1). El quehacer académico no escapó a la debacle generada por esta nueva pandemia. Es así que las Facultades y Escuelas de Odontología del país reaccionaron y siguiendo las restricciones sanitarias generales priorizaron la salud de estudiantes, docentes y pacientes, debido al alto riesgo de contagio dentro de los ambientes clínicos odontológicos, optando por el cese de las clases y prácticas clínicas presenciales y continuando las actividades de manera remota(2). Sorprendentemente, en cuestión de un par de semanas, migraron de lo presencial a lo virtual, por lo que habría que preguntarse si el cuerpo académico estaba preparado para ello(2), por cuanto se ha profundizado ampliamente en el estudio de las necesidades, emociones y aprensiones del cuerpo estudiantil, no así en la experiencia docente. Realizar trabajo académico requiere un nivel de concentración elevado, que a veces es complejo de alcanzar desde el hogar en esta situación de docencia remota por pandemia, más aún si se convive con más personas(3). Las distracciones pueden afectar y crear un clima que interfiere en el bienestar personal, en el trabajo y en el entorno familiar(3). Si consideramos, además, el poco tiempo que hubo para capacitación respecto a cómo modificar las estrategias educativas tradicionales para adecuarlas a los nuevos ambientes de aprendizaje, estas situaciones en su conjunto impusieron un importante desafío para los docentes(4,5). En base a la información planteada es que surgió la necesidad de analizar la experiencia docente durante la implementación y ejecución de la enseñanza remota bajo contexto pandemia COVID-19 en las Facultades y Escuelas de Odontología de Chile.
MATERIAL Y MÉTODO Se diseñó un estudio de tipo observacional, de corte transversal, cuya población objetivo fueron los docentes de Odontología que realizaron docencia remota producto de la pandemia por COVID-19 durante el año académico 2020 en las siguientes casas de estudio: Universidad Católica de Chile, Universidad de Antofagasta, Universidad de Chile, Universidad de Concepción, Universidad de La Serena, Universidad de La Frontera, Universidad de los Andes, Universidad de Talca, Universidad de Valparaíso, Universidad Mayor y Universidad San Sebastián. Los siguientes criterios de inclusión fueron considerados:
Se realizó una técnica de muestreo no probabilístico, por conveniencia. El tamaño de la muestra fue calculado considerando:
Con estos valores se determinó una muestra de 384 personas. Para este estudio, un cuestionario electrónico fue creado especialmente con el fin de recopilar la información necesaria. Siguiendo la técnica Delphi, se realizó un consenso en el que participaron dos expertas en el diseño de encuestas sobre salud ocupacional y los autores. Este proceso se ejecutó en dos fases:
Conformado el cuestionario, mediante la utilización del software Google Forms®, se configuró la encuesta. Se constituyó así la Encuesta de Docencia Remota por COVID-19 (EDR COVID-19), encuesta anónima que inicia con una guía introductoria de consignas procedimentales a fin de cumplir con las consideraciones éticas donde se declara un consentimiento informado, que se da por aceptado si el individuo responde la encuesta, no describiéndose resguardos éticos (Anexo 1). La encuesta quedó conformada por el Cuestionario de Docencia Remota por COVID-19 (CDR COVID-19), cuestionario de tipo restringido, con 30 preguntas en batería, agrupadas en cinco dimensiones (Anexo 2):
Para conocer la factibilidad de la EDR COVID-19, se realizó una prueba piloto. Para tal efecto, se aplicó a 25 personas durante un período de una semana. Una vez finalizada la prueba piloto e identificadas las dificultades, se efectuaron los cambios oportunos y se procedió a su aplicación, difundiendo la encuesta vía online a través de redes sociales, entre el 17 de agosto y 14 de septiembre de 2020. Para el análisis, se describieron los resultados en base a porcentajes (para variables categóricas) y en base a rangos (para variables numéricas), dependiendo de la distribución de los datos.
RESULTADOS En base al consolidado de respuestas obtenido, los resultados muestran que un 53,9% de los docentes encuestados se encuentra bajo la modalidad de contrato a honorarios y desempeñando una carga académica promedio de 18 horas semanales de trabajo. Los datos revelaron que el 58,6% de los encuestados son quienes más contribuyen al ingreso de los hogares. Tomando en cuenta esta cifra, es importante tener presente que el 22,1% de los docentes reportó haber perdido sus trabajos en la Universidad producto de la pandemia; atendiendo a estos números, prácticamente uno de cada cuatro colegas perdió su trabajo. Además, el 18,4% de los encuestados también reportó haber perdido por la pandemia otros trabajos remunerados que tenían como dentista. En relación a las medidas adoptadas por las Universidades para adaptarse a la nueva situación educativa impuesta por la pandemia, el 90,1% de los encuestados reportó que su Universidad sí se ha preocupado de realizar capacitaciones docentes para la enseñanza remota. El 66,4% de los docentes relató haber trabajado con la misma cantidad de alumnas/os que previo a la pandemia y sólo un 25% reportó haber trabajado con una cantidad mayor de alumnos que previo a la pandemia. Un 77,7% de los encuestados declaró que sí se ha mantenido la comunicación tanto entre los equipos de trabajos como con las jefaturas; sin embargo, al valorar la ayuda que reciben los docentes por parte de sus pares y sus jefaturas para llevar a cabo su trabajo en enseñanza remota, este porcentaje cae, donde sólo un 50% de los encuestados sí relató recibir ayuda de pares y jefaturas, mientras que un 17,1% reportó no recibir ayuda ni de pares ni jefaturas. Atendiendo a la nueva realidad de la enseñanza remota que los docentes imparten desde el hogar, un 25,7% de los docentes encuestados reportó no contar con el espacio físico adecuado en sus hogares para trabajar en el formato de enseñanza remota y un 3,9% relató no contar con los implementos e insumos tecnológicos necesarios para realizar dicho trabajo. Un 89,5% de los encuestados relató tener que realizar trabajo doméstico y un 50,7% estar pendientes del cuidado y/o educación de niños durante una jornada laboral. Como corolario, un 79,6% de los docentes reportó que su trabajo le ha generado algún tipo de alteración en la dinámica familiar. Al comparar la enseñanza tradicional presencial con el método de enseñanza remota llevado a cabo durante la pandemia, el 75,7% de los encuestados relató sentirse capacitada/o para impartir enseñanza remota, un 59,9% de los docentes declaró sentir que sí se logran los objetivos o competencias de aprendizaje a través de la enseñanza remota y un 57,2% tuvo la sensación de que su trabajo en la enseñanza remota es valorado por sus alumnas/os. El 96,7% de los encuestados percibió que la cantidad de trabajo realizado durante la enseñanza remota ha sido mayor que el realizado con la educación presencial y, al analizar la carga contractual, el 93,4% de los docentes consideró que el método de enseñanza remota le ha demandado más tiempo de trabajo que el estipulado en su contrato. Los resultados obtenidos para la dimensión Estado de Salud, referida a la salud mental y/o bienestar psicológico autopercibidos, se describen en la Tabla 1.
DISCUSIÓN La irrupción forzada y repentina de la educación remota por la pandemia más la situación de confinamiento en muchas ciudades del país, transformaron a los hogares en los nuevos lugares de trabajo, debiendo combinar y armonizar las jornadas de trabajo laboral con las jornadas de trabajo realizadas en la esfera doméstica y familiar(3); equilibrio difícil de conseguir por cuanto pudimos comprobar una alteración de la dinámica familiar en la mayoría de los hogares de los docentes encuestados. Para resguardar el bienestar, es recomendable planificar una rutina que contemple la diferenciación de los espacios productivos de trabajo y los tiempos familiares y de recreación, posibilitando la realización de pausas activas durante el día y acotando las expectativas de productividad, sobre todo para quienes se encuentren realizando actividades de cuidado de menores(3). El trabajo realizado por las Universidades para adaptarse a la enseñanza remota resultó pertinente en la ejecución de capacitaciones docentes y en la mantención de los canales de comunicación; sin embargo, debe mejorar en el desarrollo de canales de ayuda entre pares y jefaturas por cuanto resulta primordial mantener las redes de cooperación para el adecuado logro del proceso de enseñanza-aprendizaje(3), así como también debe mejorar el acompañamiento docente a través de monitoreos constantes durante la ejecución de la enseñanza remota(2). Este último punto se vuelve fundamental si consideramos que la mayoría de los encuestados consideró que la carga laboral ha sido mayor. Es muy importante que los docentes se mantengan en contacto permanente a fin de propiciar la búsqueda de soluciones comunes ante las dificultades particulares que deben enfrentar en la realización de sus actividades o bien accediendo a los diversos recursos formativos que contempla su Universidad(3). El trabajo realizado por el estamento docente para adaptarse a las demandas y restricciones educativas impuestas por la pandemia se vio reflejado en que un 75,7% de los docentes encuestados reportó sentirse capacitada/o para impartir enseñanza remota, cifra que contrasta con el 75% de los docentes en Latinoamérica que no se sienten preparados para incorporar nuevas tecnologías ante la pandemia(4). La percepción docente decae respecto al logro de los objetivos o competencias de aprendizaje y a la valoración de su trabajo por parte de los alumnos/as. Esto último concuerda con el estudio de CIPER Chile: “el docente hace preguntas y nadie contesta, no ve gestos, no sabe si sus estudiantes están escuchando, o si siquiera están, no hay nada en la corporalidad del otro que ayude a la comunicación generando una sensación de incertidumbre y frustración”(9). Si bien esta situación de docencia remota puede incrementar la autoexigencia, la sobrecarga y la presión de los docentes al producir mayor incertidumbre sobre los procesos de aprendizaje, considerando que hoy éstos dependen en gran medida de factores que se encuentran fuera de su control, es recomendable concentrarse en lo que efectivamente se puede realizar, reconociendo que todos estamos aprendiendo a trabajar y enseñar en un nuevo formato(3). La implementación de la enseñanza remota, en un corto periodo de tiempo, sumado a la pandemia y al confinamiento asociado, han influido en la estabilidad emocional y conductual de los docentes encuestados(10). Los ítems analizados permitieron comprobar una disminución en el bienestar psicológico de los docentes. La mitad de los encuestados se ha sentido más triste o deprimido, lo que es, en general, coincidente con la disminución de los sentimientos de optimismo como componente fundamental de la dimensión de estabilidad emocional(10). Importante es destacar el porcentaje de docentes que reportan habitualmente sentirse tristes o deprimidos, en una de las profesiones con más altos índices de suicidio en el mundo(11). Un porcentaje mayor de los encuestados reportó sentirse constantemente más bajo presión que lo habitual, esto es concordante con los estudios que muestran un aumento de los sentimientos de irritabilidad y enfado al verse confinados y rodeados por un ambiente de incertidumbre laboral sin alternativas de escape a estos sentimientos experimentados(10). Mantener una actitud positiva y una disposición reflexiva en torno a la situación actual posibilitará la comprensión de la crisis como una oportunidad para avanzar hacia metodologías diversas y contemporáneas(3). Así, profesores estresados intentaron transmitir conocimientos. Todo este contexto cambió la percepción de autoeficacia del docente. Hay una presión extra en torno a evitar el error, ya que toda su actividad queda registrada, debe aislarse en su casa en un lugar donde no pueda ser interrumpido, sumado a las dificultades de las plataformas tecnológicas. Todos estos tropiezos contribuyeron a mermar la confianza en el desarrollo de sus cursos, con las implicancias de baja motivacional y estrés. Esta sintomatología es una repuesta a lo que se ha denominado “corona teaching”, la cual derivó de transformar la docencia sin hacer los cambios curriculares pertinentes(12). Los datos aportados por la encuesta EDR COVID-19 proporcionan información imprescindible para evaluar las políticas de trabajo y salud del estamento docente, lo que permitirá a la Universidades tomar mejores decisiones con respecto a la educación remota en Odontología en el futuro.
CONCLUSIONES Los hallazgos obtenidos reflejan las consecuencias familiares, laborales y psicológicas que la educación remota bajo contexto pandemia COVID-19 tuvo sobre los encuestados y cómo todo ello moduló los posibles cambios en emociones y conductas. Estos resultados suponen un primer paso para la evaluación de la experiencia docente; no obstante, dado su carácter inicial, deben ser puestos a prueba en futuros estudios.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Artículo recibido el 20/01/21, Aceptado el 04/04/21.
Dirección del autor:
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Departamento de Rehabilitación Bucomáxilofacial, Escuela de Odontología, Universidad de Talca, Talca, Chile.
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