Luego del anuncio del presidente Sebastián Piñera de la creación de un fondo especial de 2 mil millones de dólares para combatir la pandemia, la Cámara de Diputados llamó a expertos en todos los ámbitos relacionados para conformar una mesa técnica que generara propuestas de utilización de estos recursos.

Manuel Novoa fue convocado a participar de la submesa Implementación de Tecnología de la Información en el control del COVID – 19, quienes entregaron sus propuestas a la Cámara de Diputados hace algunos días.

“Mi incorporación a este trabajo se dio gracias a la jefa de campos clínicos de la Universidad de Concepción, profesora Yolanda Zúñiga, ya que necesitaban a alguien que tuviera una aproximación a la tecnología más dura, una visión más técnica y concreta de la informática”, señaló Novoa.

En las propuestas elaboradas por esta instancia, Novoa destaca que estuvieron enfocadas en cómo la tecnología puede apoyar el proceso de seguimiento y acompañamiento de los pacientes Covid.

De hecho, una de las ideas presentadas por el profesional de la DTI es justamente la generación de una aplicación móvil de acompañamiento y también la integración de Epivigila (sistema electrónico de notificación de “Enfermedades de Notificación obligatoria” del Ministerio de Salud) con los sistemas propios que cada institución maneja para el registro de la información.

“Lo que ocurre actualmente es que cada institución lleva su registro propio de pacientes. A veces incluso en una planilla Excel, no en un sistema informático, y luego de hacer ese registro, debe ingresar a Epivigila y volver a completar los datos del paciente. Esto genera un sinnúmero de posibles problemas, desde el tiempo que toma hacer el registro, hasta la posibilidad de cometer errores de digitación”, indicó Manuel Novoa.

La submesa estaba integrada por profesionales de distintas organizaciones, como la Sociedad Chilena de Enfermedad Respiratoria, el Colegio de Enfermeras y la Sociedad Chilena de Enfermería en Salud Ocupacional, y también de instituciones de educación superior como la universidades de Viña del Mar, Atacama y Bernardo O’Higgins, además de la UdeC.

“Fue tremendamente positivo que en la mesa hubiera gente de hospitales, académicos, enfermeras… porque eso entregó miradas súper amplias de la problemática”, aseguró Novoa, agregando que “quedé muy contento con esta oportunidad. De hecho recibí oficialmente las felicitaciones y el agradecimiento por los aportes entregados. Siento que quedamos súper bien parados”, concluyó.